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Murió Eduardo de Lázzari, ex juez de la Corte Suprema bonaerense, tras contagiarse de coronavirus

El ex funcionario se encontraba internado en el Hospital Italiano de La Plata. Se había jubilado en marzo pasado

Lunes 19 de Abril de 2021

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19:32 | Lunes 19 de Abril de 2021 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

El ex ministro de la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Eduardo de Lázzari, murió este lunes a los 76 años en el Hospital Italiano de La Plata, tras contraer coronavirus. Se había jubilado en marzo pasado.

De Lázzari se encontraba internado en el centro médico desde hacía varios días, a raíz de una serie de complicaciones en su salud como consecuencia de haber contraído COVID-19.

Padre de cinco hijos y profesor consulto de la Universidad Nacional de La Plata, egresó de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de esa institución en 1967, fue juez de la Cámara Civil y Comercial del Departamento Judicial de La Plata y luego procurador general de la provincia de Buenos Aires. Integró la Suprema Corte de Justicia bonaerense hasta marzo pasado.

El tribunal emitió un comunicado tras conocerse la noticia: “La Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires lamenta profundamente el fallecimiento del Dr. Eduardo Néstor de Lázzari. Ministro de la Suprema Corte de Justicia desde el año 1997 hasta el 1° de marzo del año en curso, el Dr. de Lázzari fue Presidente del cuerpo en tres oportunidades, en los períodos 2004/2005, 2021/2013 y 2019/2020″.

La trayectoria de De Lázzari

Como funcionario público en la provincia de Buenos Aires fue director de Apremios del Ministerio de Economía; director de Asesoría Legislativa de la Subsecretaría de Justicia; subjefe del Servicio Correccional; secretario de Seguridad; y -ya en el cargo de juez de la Suprema Corte de Justicia- presidente del Consejo de la Magistratura y de la Junta Electoral provincial.

En el ámbito de la Justicia se desempeñó como juez de la Cámara Federal de Apelaciones de La Plata y presidente de la Cámara Segunda de Apelación en lo Civil y Comercial del Departamento Judicial de La Plata. Entre noviembre de 1994 y octubre de 1996 fue procurador general de la Suprema Corte de Justicia.

Fue durante el gobierno de Eduardo Duhalde en la provincia de Buenos Aires que asumió como ministro de la Suprema Corte de Justicia bonaerense. Ocupó el cargo hasta el 1 de marzo pasado, cuando renunció “con fines jubilatorios”.

Además de su reconocida trayectoria en el cargo, su nombre trascendió a mediados de 2019 cuando lo enfrentó la entonces gobernadora María Eugenia Vidal, por haber hecho referencia a una supuesta operación política ejecutada a través del Poder Judicial.

“Estoy hablando de causas armadas artificialmente, estoy hablando de abusos de testigos de identidad reservada, de arrepentidos, de factores de presión que inducen, fomentados y fogoneados por ciertos medios de prensa, a dictar condenas mediáticas y que llevan a un panorama sinceramente deplorable, en donde influyentes de todo tipo, espías, traficantes de escuchas telefónicas, con ciertas complicidades de algunos magistrados y miembros del Ministerio Público, terminan por generar un panorama que es absolutamente preocupante”, afirmó De Lázzari en un foro que reunió a más de cien jueces.

Las declaraciones del presidente de la Corte bonaerense habían pasado desapercibidas en el fragor de la campaña electoral. Pero Cristina Kirchner le dio entidad y visibilidad a través de un tuit que tuvo muchísima repercusión pública.

“Por favor, escuchalo atentamente. El que habla no es un político. No es oficialista. Tampoco es opositor. Es el Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires. Imperdibles 2 minutos 56 segundos para entender lo que pasa en el Poder Judicial de tu país”, publicó Cristina Kirchner en sus redes sociales.

Vidal no creyó que fuera casualidad que De Lázzari afirmara que había operaciones judiciales y que Cristina ratificara sus opiniones. Por ese motivo, la entonces gobernadora enfrentó al juez, aunque eso implicó un tácito conflicto de poderes. Y lo hizo a través de dos instancias diferentes: instar a que él lo ratifique o que descarte sus afirmaciones en sede judicial.

“Si hay un delito de corrupción en mi gobierno, tengo que denunciar a quien sea; si no, yo soy cómplice. Si el presidente de la Corte sabe que hay persecución y causas armadas, lo tiene que denunciar. Cuando uno tiene estos niveles de responsabilidad tiene que ser consecuente con lo que dice en la acción judicial”, dijo Vidal en América TV

Fuente: Infobae

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