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Mientras la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner espera por la ejecución de su condena, la gente hace una vigilia en la calle San José 1111.
Jueves 12 de Junio de 2025
20:29 | Jueves 12 de Junio de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
Este martes se ratificó la condena por la causa Vialidad a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. En este marco, la exmandataria aguarda en la casa de su hija Florencia, ubicada en la calle San José al 1111, a la espera de la ejecución de su condena y de saber si deberá cumplir prisión domiciliaria o no.
Junto a ella se encuentran los manifestantes que hacen una vigilia en la puerta del edificio, y que la acompañan. MDZ fue al lugar y vio cómo es el mercado que se armó tras la ratificación de la condena.
Hay quienes comentan que "donde hay una necesidad, hay un derecho", pero en este caso parece ser que donde hay una necesidad, hay un mercado. Algo así sucede en las afueras de donde se encuentra hospedada la ex mandataria, quien, a todo esto, tiene tiempo hasta el miércoles para presentarse voluntariamente en el Tribunal Federal N°12 de Comodoro Py.
En la intersección de las calles San José y Humberto 1°, varios tomaron esta situación como una oportunidad para instalar parrillas y diversos puestos de comida: hamburguesas completas, sándwiches de salame y queso, bondiolas e incluso empanadas vegetarianas. Además, también venden bebidas, e incluso tragos, desde vodka hasta el típico fernet. Y para facilitar la venta, todos aceptaban transferencias por billeteras virtuales.
Los precios son uniformes y populares: el chori no pasa de los cinco mil pesos, mientras que la coca sale $3.000. La hamburguesa también tiene el mismo precio y se ofrece completa, con huevo y cebolla, junto a aderezos a elección: desde chimichurri o salsa criolla hasta las tradicionales mayonesa, kétchup y mostaza.
Aquellos que querían darse otro gusto podían encontrar el sándwich de bondiola por seis mil pesos. Para quienes no comen carne, también había una alternativa: dos empanadas veggies por $3.500 o tres por $5.000.
En cuanto a las bebidas alcohólicas, algunos vendían las latas de cerveza en $5.000 o $6.000, dependiendo del tamaño. Incluso había quienes ofrecían tres por $10.000. Aquellos que prefirieran el fernet, encontraban el vaso de un litro por $8.000.
Quienes quisieran llevarse un souvenir podían encontrar dos stickers por solo mil pesos o pilusos por diez mil. También había pines y escarapelas, algunas con la forma de las Islas Malvinas y otras tradicionales.
A todo esto, el uso de los baños: solamente quinientos pesos.
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