La vuelta de Osvaldo, atada a la reelección de Daniel Angelici

19:20 | Martes 24 de Noviembre de 2015 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

Tiembla el fútbol argentino. Un terremoto pelilargo, de lentes, vuelve por más: Daniel Osvaldo, cuyo paso por Boca tuvo más de farándula que de goles, está a punto de volver a ponerse la camiseta del club Xeneize. A punto porque depende, en gran parte, de lo que suceda el 6 de diciembre, en las elecciones a presidente. Si Daniel Angelici consigue extender su mandato, el arribo del "Loco" será una realidad.

Costó poco acordar los números del contrato. El representante del delantero, Darío Decoud, concilió la cifra con los dirigentes del club rápido, fugazmente. Costó poco: al delantero le pesó mucho ver los festejos de campeón a la distancia, se emocionó cuando habló con sus compañeros, que todavía mantienen un contacto fluido con él. Quiere estar acá, cerca de su hijo y con la camiseta de sus amores.

Uno de los problemas tiene nombre y apellido: se llama Jonathan Calleri. Rodolfo Arruabarrena, que aprecia mucho al ex Juventus, prefiere al joven atacante. Es una de sus debilidades. Traer Osvaldo implica relegar a Calleri, o ponerlo a competir el puesto contra un jugador de jerarquía. Por eso, el ex All Boys expresó su deseo de irse del club si efectivamente Osvaldo regresa. Había interesados. Ninguno expresó su interés en una oferta formal.   

El otro inconveniente son las elecciones. Si bien Angelici es favorito, el acuerdo es con la actual dirigencia. Puede que otra fuerza consiga la presidencia y decida no incorporarlo o que él cambie su postura en las negociaciones imposibilitando su llegada. Se estima que, si el Tano gana,firmaría rápidamente. Pero ningún otro candidato se manifestó en contra de sumarlo.

Carlos Tevez también puja por la vuelta de su amigo. Compañeros en Juventus, crearon un vínculo íntimo. Todavía se hablan. Tevez le dijo, antes de sumarse a los entrenamientos, que quería jugar otra vez con él. No pudieron: el préstamo de Osvaldo concluyó y firmó con Porto. Ahora, con pocos minutos en Portugal y con la melancolía de lo lejano, de lo perdido, hace fuerza para ponerse la azul y oro.

El fútbol argentino tiembla. Las redes, también: Osvaldo está cerca.