La actriz volvió a acompañar a Mauro Icardi en la celebración del título, y protagonizó un altercado con parte de la seguridad
18:30 | Sábado 31 de Mayo de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
Antes de seguir viaje rumbo a Ibiza, la China Suárez y Mauro Icardi dejaron una nueva postal de su larga estadía en Estambul. La pareja llegó a la ciudad turca para, entre otras cosas, festejar un nuevo título del Galatasaray, el club que defiende el rosarino desde 2022. A pesar de no jugar profesionalmente desde noviembre pasado, cuando sufrió una grave lesión, el delantero es uno de los futbolistas más queridos por la hinchada, tal como quedó demostrado en la caravana celebratoria de las últimas jornadas.
Este viernes, los simpatizantes del equipo rojo y amarillo se congregaron nuevamente en el Rams Park, esta vez para el último partido de la temporada, que terminó en victoria contra el Istanbul BB. Como había ocurrido días atrás, Mauro ingresó al campo de juego de la mano de la China, quien estaba con sus tres hijos: Rufina, fruto de su relación con Nicolás Cabré, y Magnolia y Amancio, de Benjamín Vicuña.
Los chicos son incondicionales de la mamá y la acompañan en cada uno de sus pasos, esta vez en el campo de juego durante la vuelta olímpica. Pero en esta oportunidad, vivieron un mal momento, sobre todo la mayor, cuando la seguridad se desbordó. Las imágenes que se ven en las redes muestran como Eugenia intenta hacerse paso entre la multitud que se agolpa frente a ellos con sus celulares en lo alto en busca de un recuerdo. La tensión va en aumento cuando la seguridad se interpone entre ella y su novio. En el medio, el rostro de Rufina, con la camiseta del popular equipo turco, denota el mal momento que está pasando.
Mauro Icardi y la China
Mauro Icardi y la China Suárez en uno de los tantos festejos del Galatasaray
“Baby, ¿los sacás? No me dejan pasar”, le dice al futbolista, que encabeza el pelotón. Entonces, el rosarino frena y gestiona con los encargados de seguridad que abran paso para su novia y sus hijos puedan caminar en calma. Recién allí, la actriz recupera la sonrisa en el rostro, y a paso firme, continúan con su andar. Fue una de las últimas postales de la pareja en suelo turco, ya que por estas horas ya aterrizaron en Ibiza, donde la actriz asistirá a una proyección de su película Linda.
Un viaje por la cultura y las emociones
Más allá de este desliz, La China vive momentos únicos en Estambul, acompañada por sus hijos, alejándose temporalmente del tumulto que rodea su vida personal. Tras un tumultuoso viaje a Milán relacionado con asuntos legales de su pareja, Mauro Icardi, cuya audiencia por el divorcio con Wanda Nara generó numerosas especulaciones en los medios y redes sociales, ella eligió refugiarse en la riqueza cultural que ofrece la región.
En una jornada marcada por el relax y la exploración, Suárez visitó el emblemático Palacio de Dolmabahçe, acompañado de una historia notable. Durante esta excursión, se observó a Rufina, su hija mayor, encantada al cantar en turco, lo cual conmovió profundamente a la actriz. Este gesto inesperado de la niña destacó como un manto de ternura y apoyo para la ex Casi Ángeles en medio de tiempos complicados.
La China Suárez y sus
La China Suárez y sus hijos de cara al Bósforo
Por un rato, hizo un alto en el fuego mediático, más o menos directo, que mantiene con Wanda Nara. Y se focalizó en la belleza arquitectónica y natural del lugar. El sitio elegido fue la puerta al mar, donde posó de frente con el Bósforo de fondo. Luego lo hicieron los niños, pero en una toma inversa, observando el estrecho y de espaldas a la cámara.
Eugenia lució un vestido corto de tono beige claro con textura fruncida en la parte superior, mangas largas de tela semitransparente y falda con diseño con vuelo. Durante la excursión, recorrió también los jardines y el interior del palacio, deteniéndose en cada uno de los detalles de la imponente arquitectura y documentándolos para la posteridad. Una burbuja en el tiempo en pleno torbellino mediático.