Este miércoles, vecinos del barrio Agrupación Gaucha 1 realizaron un corte sobre la ruta nacional 38, a la altura de la salida hacia zona Sur, para reclamar por la falta de agua potable que denuncian sufrir desde hace cinco meses.
11:28 | Miércoles 12 de Noviembre de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
El reclamo comenzó con una quema de cubiertas a la vera de la ruta, cerca de una estación de servicio. Bomberos tuvieron que intervenir para apagar el fuego y despejar los restos de goma, pero aun así los vecinos mantuvieron interrumpido el tránsito sobre la calzada. Recién después del arribo de Gendarmería y de las primeras gestiones de mediación se habilitó el paso de los vehículos de manera parcial y luego se levantó el corte.
Los manifestantes, habitantes del barrio Agrupación Gaucha 1, contaron que llevan alrededor de cinco meses sin una gota de agua en las canillas. Explicaron que dependen exclusivamente de camiones cisterna que recorren la zona para cargar los tanques domiciliarios, pero señalaron que el servicio es irregular y que muchas familias se quedan sin agua porque los camiones pasan en horarios en los que la mayoría está trabajando. “Nadie puede vivir sin agua”, resumió una vecina, que aseguró que en varias casas tienen que comprar bidones para poder consumir agua segura.
Otro de los puntos de queja fue la calidad del agua que llega en los camiones. Los vecinos denunciaron que el líquido suele llegar turbio y con sedimentos, por lo que sólo lo usan para higiene y limpieza, mientras que para tomar recurren a dispensers o agua envasada, con el costo extra que eso implica para cada familia. Afirmaron que ya se realizaron reuniones anteriores con representantes de la empresa y que las explicaciones siempre giran en torno a perforaciones rotas, bombas quemadas o falta de fondos para las obras, pero sin soluciones concretas.
En el lugar se hizo presente el ingeniero Sarasola, de Aguas Riojanas, quien dialogó con los vecinos y con la prensa. El funcionario explicó que el problema principal es el colapso de una perforación en la zona de acceso a Villa Regina: aclaró que no se trata de una simple bomba quemada, sino de una rotura estructural del pozo, lo que obliga a trabajos de reparación más complejos. Comentó que en las últimas horas se hicieron pruebas, pero que la perforación volvió a fallar y que debieron desmontar nuevamente la bomba para revisar el interior con una cámara y rehacer los “parches” necesarios.
Sarasola agregó que, en paralelo, se está preparando la incorporación de otra perforación ubicada en el hipódromo, que ya fue probada y equipada. Según detalló, falta construir un nexo de aproximadamente mil metros de cañería para conectarla al acueducto que corre por la colectora de la ruta 38, y calculó un plazo de unos diez días para que ese refuerzo entre en funcionamiento. Mientras tanto, sostuvo que la empresa mantiene un operativo diario de camiones aguateros para asistir a los barrios afectados, aunque los vecinos insisten en que esa ayuda no alcanza.
La discusión también dejó al descubierto otro problema: el crecimiento desordenado del barrio y la falta de redes adecuadas. El ingeniero reconoció que la zona tiene “muy poca red” y que se necesita un plan de obra para ampliarla, aunque remarcó que, sin agua suficiente, la red por sí sola no soluciona nada. Los vecinos, por su parte, remarcaron que lo urgente es volver a tener agua en las casas, al menos durante la noche, y advirtieron que, si las promesas vuelven a quedar en palabras, no descartan volver a cortar la ruta.