Un informe que pidió la Justicia sostiene que Fabiola Yañez está en un estado de “fragilidad emocional” por la violencia de género

Fue una audiencia por zoom, breve, pero que no dejó ninguna duda sobre el agobio que vive por estas horas la ex primera dama. Así lo manifestó ella ante los especialistas que la escucharon. Habían pasado poco más de 24 horas desde que Fabiola Yañez había resuelto impulsar la acción penal contra Alberto Fernández, cuando la Procuración General de la Nación, puso a su disposición a la Dirección General de Acompañamiento, Orientación y Protección a las Víctimas (DOVIC). El informe de esa primera audiencia, expuso que se encontraba en un estado de "fragilidad emocional". El cuerpo técnico la entrevistó el pasado jueves 8 de agosto.

El informe de una carilla incorporado al expediente da cuenta del estado vulnerabilidad en el que se encuenra Yañez por estos días. La audiencia se centró en brindarle acompañamiento, como así también poder evaluar en qué circunstancias se encuentra la ex primera dama tras la radicación de la denuncia penal que dejó imputado a Alberto Fernández por el delito de lesiones leves reiterada en el marco de violencia de género.

Hay un factor determinante que se analiza en el marco de la causa penal y responde a la “enorme asimetría de poder entre las personas involucradas en el expediente”, como definió una fuente judicial a Clarín. La idea responde a la violencia que fue sometida Fabiola Yañez y la persona que la ejerció: “No era tan sólo un vínculo familiar, sino que estamos hablando de la máxima autoridad del país, una notable asimetría de poder”, amplió la misma fuente.

Desde el 28 de junio cuando por primera vez, el juez Ercolini se comunicó vía zoom en el marco de una audiencia formal, con la ex primera dama hasta este martes 6 de agosto que decisión denunciar penalmente a Fernández, ella manifestó haber estado sometida a un “terrorismo psicológico”. La figura como tal no existe en el Código Penal, pero sí la de hostigamiento que es la que aplica al caso. Habló justamente de un acoso permanente que las últimas semanas, ejerció el ex presidente hacia ella. Eso la condujo a avanzar con la denuncia.

Cuando la DOVIC recorrió los detalles de esa primera declaración, explicándole los alcances de ese cuerpo de especialista, se observó que Yañez, aún reviste un estado fragilidad que le impediría someterse a una declaración testimonial, según los profesionales. Esta última instancia es de suma relevancia para el caso, ya que permitirá a la justicia avanzar con la investigación: determinar hechos, lugares, durante cuánto tiempo fue agredida, las formas que se ejerció esa violencia, el contexto de los hechos, la posible existencia de testigos frente a los actos de violencia que sufrió la ex primera dama. Trazar una hoja de ruta para constatar cada uno de los hechos que exponga.

De todos modos, la DOVIC que acompaña a la víctima en casos como éstos, consideró que por el momento “no estaría en condiciones de declarar”, según pudo reconstruir Clarín.

Los primeros resultados de esa audiencia se volcó en una sola carilla. Este equipo de especialistas no cumple un rol de constatación de hechos, sino de acompañamiento y contención. Será la fiscalía que tiene delegado el caso la que resuelva las primeras medidas a adoptar una vez que escuche a la ex primera dama.

Cuando la entrevista avanzó y se quiso profundizar sobre los hechos que tomaron estado público, pero que fueron denunciados por Yañez, ella manifestó inmediatamente un nivel de angustia que le impidió seguir hablando. Sólo se remitió a reiterar algo que dijo también ante el juez Ercolini: “siento agobio” y minutos después, no negó la “incomodidad” que la situación le representaba a la hora de profundizar en los detalles de las situaciones de violencia que padeció.

“No se encuentra en condiciones de declarar en lo inmediato”, fue una de las conclusiones tras escucharla durante ese primer encuentro con el cuerpo especializado que integra la DOVIC. Fue la primera de otras entrevistas que se desarrollarán con la finalidad de brindarle contención a la ex primera dama.

Desde Madrid, este sábado Yañez se reunirá por primera vez con su abogada, Mariana Gallego. Ante la DOVIC manifestó que entendía la relevancia de contar con una abogada, y allí manifestó que iba a cambiar de representante legal. Por esas horas se especulaba con la representación de Juan Pablo Fioribello que terminó denunciado ante el Colegio de Abogados por violación del secreto profesional por su declaraciones mediáticas sobre las charlas que iba manteniendo con Yañez.

La Justicia federal no descarta que en los próximos dias y tras asumir la defensa oficial en el expediente, la abogada Gallego pida que se tenga como parte querellante a la ex primera dama. “Tiene carácter de parte”, explicaron fuentes de la causa al sostener que es un derecho que no se le negaría en caso de requerirlo.

Cuando habló por primera vez ante el juez Ercolini, la ex primera dama no pudo evitar quebrarse en más de una ocasión. Tampoco ocultó el temor que vivía ante los hechos que estaba denunciando, pero señaló que estaba dispuesta a avanzar en el impulso penal. Al finalizar esa audiencia, se le preguntó “¿estamos hablando de quién?”. Fabiola Yañez sólo añadió: “Alberto Ángel Fernández”.