Si bien las estadísticas vinculadas con el turismo al exterior y los pagos con tarjeta pueden estar contaminadas, porque encubrirían importaciones de bienes, lo cierto es que el drenaje de divisas por esta vía sigue al dente.
20:29 | Domingo 29 de Junio de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
Se flexibilizó parte del cepo cambiario y era dable esperar que se intensificara el drenaje de divisas por diversos canales, pero el que sigue firme perdiendo reservas es el sector de servicios que, en mayo pasado, de acuerdo con datos del Banco Central (BCRA), volvió a anotar otro saldo deficitario por casi US$1.000 millones. Así, al cabo de los primeros cinco meses del año, el déficit acumulado de servicios supera los US$5.100 millones, mientras que en el mismo período del año pasado apenas superó los US$800 millones, lo que habla a las claras de tenor de la tendencia.
Según las últimas estadísticas oficiales, el mes pasado y encadenando diecisiete meses consecutivos, la cuenta Servicios del Balance Cambiario del BCRA arrojó déficit, en esta oportunidad de US$939 millones, frente a los US$551 millones de un año atrás. Los grandes números muestran que el rojo sectorial del mes pasado se explica por el turismo internacional y las compras con tarjeta. Porque los egresos netos en concepto de viajes, pasajes y otros pagos con tarjeta totalizaron US$889 millones mientras que los vinculados a los llamados "Otros servicios" sumaron US$207 millones más otros US$174 millones de "Fletes y Seguros". Por suerte, las transacciones vinculadas con la prestación de servicios empresariales, profesionales y técnicos siguen siendo netamente favorables, generando en mayo un flujo positivo neto de US$331 millones.
Dado el tenor de los números vinculados con el turismo y los consumos en el exterior, el BCRA aclaró que la cuenta de Viajes, pasajes y otros pagos con tarjeta no debe asociarse únicamente a los gastos por viajes ya que, en los giros que se hacen al exterior para cancelar los saldos con las empresas emisoras de tarjetas internacionales, se incluyen tanto los consumos que se realizan por viajes al exterior como las compras no presenciales de bienes y servicios a proveedores del exterior. Y de forma recíproca, en los ingresos también se incluyen las compras no presenciales que hacen con el uso de tarjetas, a proveedores argentinos, quienes califican como "no residentes". Por eso, el ente monetario, percatados de que la información estadística no era del todo clara, decidió a partir de julio diferenciar adecuadamente entre los consumos por viajes desde y hacia al exterior y las compras no presenciales de bienes y servicios a proveedores del exterior/desde el exterior a proveedores locales. Ocurre que ya varios economistas venían alertando que el gasto en turismo internacional y los pagos con tarjeta al exterior, podían encubrir lisa y llanamente importaciones de bienes.
Además, el BCRA sostiene que más del 70% de los egresos por Viajes, pasajes y otros pagos con tarjeta, son directamente cancelados por los clientes con fondos en moneda extranjera (cabe señalar que meses atrás sostenían que era el 50%, y en abril que eran el 60%), lo que reduce el impacto deficitario de estos consumos en el mercado de cambios, dado que estos fondos son recibidos por las entidades y luego vendidos, por lo que constituyen fondeo para el mercado de cambios.
Pero amén del tema turismo y tarjeta, hay otro factor a tener muy en cuenta y que juega fuerte en el saldo negativo de la cuenta corriente del Balance Cambiario y son las operaciones en concepto de ingreso primario que representaron una salida neta de US$1.029 millones. Esta salida de divisas responde a los pagos netos de intereses por US$1.011 millones y a egresos netos de utilidades, dividendos y otras rentas al exterior por US$18 millones.
Por otro lado, el Gobierno y el BCRA realizaron cancelaciones netas de intereses por US$874 millones, explicadas por cancelaciones brutas de intereses al FMI por US$612 millones, por giros a organismos internacionales (excluido el Fondo Monetario) por US$205 millones y por otros conceptos por US$70 millones. Mientras que el informe del BCRA muestra que el sector privado realizó cancelaciones netas de intereses por US$137 millones, y que las operaciones por ingreso secundario representaron un superávit de US$7 millones.
Con relación al balance de los primeros cinco meses del 2025, el déficit de servicios (US$4.915 millones) se explica, principalmente, por Viajes, pasajes y otros pagos con tarjeta que acumulan un flujo neto negativo de casi US$4.100 millones, también se destaca los Cargos por uso de la propiedad intelectual por otros US$444 millones, más otros US$403 millones de Servicios de transporte de pasajeros, otros US$582 millones de Fletes, y en menor medida los US$222 de Servicios de arrendamiento operativo, unos US$156 millones de Otros servicios de transportes, US$171 millones de Servicios de seguros, US$145 millones de Servicios del Gobierno, y US$63 millones de Servicios financieros. Mientras que los Servicios empresariales profesionales y técnicos acumularon un superávit de US$1.346 millones en lo que va del año, seguido de los Servicios relacionados con el comercio con US$40 millones. Vale señalar que el acumulado del déficit de servicios ya supera el rojo de todo el año pasado, o sea, que si continúa este drenaje mensual de divisas a fin de año se podría superar los récords históricos de 2017 y 2022 cuando el sector servicios registró déficit de US$10.819 millones y US$10.106 millones, respectivamente. Todo un desafío para el stock de reservas del Banco Central.
