La marplatense de 21 años, que ingresó en el cuadro principal como lucky loser, perdió ante la alemana Laura Siegemund por 6-3 y 6-2; el partido tuvo dos interrupciones por la lluvia
20:29 | Domingo 06 de Julio de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
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Nada debería ser igual para Solana Sierra (21 años) a partir de su aventura en Wimbledon. El camino de la marplatense (101° del ranking) en el tercer Grand Slam de la temporada, el más prestigioso del circuito, finalizó en los octavos de final, al caer sobre el césped británico ante la alemana Laura Siegemund (104° en singles, 22° en dobles) por 6-3 y 6-2, en 1h19m; sin embargo, el crecimiento que ostentó en la elite la colocará en otro nivel. No sólo porque dará un destacado salto en el ranking (unas 35 posiciones) y porque embolsó un premio económico casi más importante que en toda su carrera (240.000 libras, es decir unos US$ 327.000, algo que le permitirá programar giras con mayor comodidad), sino porque hizo un clic tenístico y emocional que debería seguir potenciándola en su evolución.
El saludo final entre la alemana Laura Siegemund y Solana Sierra; la europea avanzó a los cuartos de final de Wimbledon
El saludo final entre la alemana Laura Siegemund y Solana Sierra; la europea avanzó a los cuartos de final de Wimbledon
HENRY NICHOLLS - AFP
Acompañada en Londres por su mamá, Marta, y por el coach portugués Miguel Fragoso, de la academia de Rafael Nadal, donde la bonaerense hace base desde marzo pasado, se encumbró como la primera tenista nacional en los 8vos de final de Wimbledon después de 21 años (la pergaminense Paola Suárez, en 2004). Además, se transformó en la primera lucky loser en alcanzar los octavos de final individual en Wimbledon en la Era Abierta y, un triunfo ante Siegemund, la hubiera distinguido como la primera perdedora afortunada en llegar a los cuartos de final en un Grand Slam en general. Se quedó muy cerca, en la puerta.
Tras el inicio en el Court 2, un estadio para cuatro mil espectadores, el encuentro tuvo apenas cuatro puntos (30-30) y se detuvo por la (siempre fastidiosa) lluvia. Ambas jugadoras se retiraron al vestuario. Luego de aproximadamente una hora, regresaron al court para seguir compitiendo. Siegemund también está jugando en dobles en major británico: junto con la brasileña Beatriz Haddad-Maia son las 11° preclasificadas y se encuentran en la tercera ronda.
Solana Sierra midiéndose con la alemana Laura Siegmund en la cuarta ronda de Wimbledon
Solana Sierra midiéndose con la alemana Laura Siegmund en la cuarta ronda de Wimbledon
Kirsty Wigglesworth - AP
Luego de la interrupción por las malas condiciones climáticas en esa porción del suroeste de Londres, Sierra entró fría en el partido: después de un error de drive en la red y una doble falta, cedió su servicio (1-0). Pero lo bueno fue que no se desmoralizó, luchó y le rompió el saque de inmediato a la germana, para igualar el score (1-1). La bonaerense tuvo una chance de quiebre en el cuarto game, pero Siegemund se escapó del ataque y sostuvo su servicio (2-2). Sierra volvió a acelerar en el sexto juego y contó con una nueva chance de quiebre, pero la jugadora de 37 años se defendió, salió del asedio y celebró con euforia (3-3).
Siegemund es una jugadora con un estilo variado y sin tanta potencia como el de Sierra: le bajó la velocidad a los peloteos tratando de complicar y quitarle el ritmo a la argentina, algo que por momentos logró. En el séptimo game, Sierra tuvo un momento de extrema confusión, la alemana tuvo break-point y Solana flaqueó, cediendo el saque con una doble falta (4-3). De inmediato, envalentonada, la jugadora nacida en la ciudad alemana de Filderstadt (donde se disputaba un torneo WTA en el que Gabriela Sabatini se coronó en 1989 y disputó las finales de 1992 y 1995) sostuvo su saque sin perder puntos (5-3). Solana sirvió bajo presión, sin margen de error y lo padeció: Siegemund tuvo dos puntos para set, pero en el primero consiguió el objetivo (6-3).
La potente derecha de Solana Sierra: esta vez la marplatense falló en el saque y Laura Siegemund la derrotó en Wimbledon
La potente derecha de Solana Sierra: esta vez la marplatense falló en el saque y Laura Siegemund la derrotó en Wimbledon
HENRY NICHOLLS - AFP
Volvió la lluvia a Londres y el partido se interrumpió en el segundo set, con la alemana ganando 1-0 y teniendo una nueva chance de rompimiento, ya que la argentina estaba por sacar 30-40 cuando el popular juez de silla sueco Mohamed Lahyani indicó que debían detenerse. Las jugadoras, mascullando bronca, volvieron a irse al vestuario y el personal del torneo cubrió rápidamente el césped con la lona. Hasta allí, Sierra había ganado apenas el 33% de los puntos con el segundo saque (4 de 14), el 8% en la red (1 de 12) y cometido 21 errores no forzados contra 15 de su rival, estadísticas que explicaban el resultado.
Luego de unos 45 minutos, las jugadoras volvieron a la cancha, ubicada en uno de los extremos del complejo. Tras el peloteo reglamentario, Sierra sacó teniendo break-point en contra y volvió a ceder su saque, tras fallar un revés; la alemana crispó el puño y tomó una buena ventaja, por 2-0. De inmediato, con la confianza en el máximo nivel, la europea defendió su saque sin perder puntos, ampliando la distancia (3-0). La eficacia del saque es lo que hizo la diferencia: mientras Sierra tuvo dificultades en sus turnos de servicio, la germana los defendió con seguridad. Solana sirvió nuevamente sin margen, dudó y, en el tercer match point, tras varios drop-shots quirúrgicos, Siegemund cerró la historia en su favor, igualando su mejor actuación en singles de Grand Slams, que habían sido los cuartos de final de Roland Garros 2020.
El festejo de Laura Siegmund, de 37 años, tras vencer a Solana Sierra en los 8vos de final de Wimbledon
El festejo de Laura Siegmund, de 37 años, tras vencer a Solana Sierra en los 8vos de final de Wimbledon
Kirsty Wigglesworth - AP
Siegemund fue muy superior en el saque: logró el 88% de primeros servicios (contra el 65% de la argentina), ganó el 67% de puntos con el primer saque (ante al 61% de Solana) y el 57% con el segundo (apenas el 39% de la marplatense, 7 de 18). Solana, bastante tensa en una circunstancia inédita en su corta carrera profesional, se encontró con una rival que la llevó hacia la red cuantas veces pudo y su efectividad voleando fue baja, del 21%. Frente a este escenario final, entonces, la última tenista argentina en llegar a los cuartos de final de Wimbledon sigue siendo Suárez en 2004. El mejor resultado de una jugadora nacional en el All England fue la final de Sabatini en 1991 (perdió con la leyenda alemana Steffi Graf en la final por 6-4, 3-6 y 8-6).
El match point
Para Sierra, el paso por Wimbledon (apenas su tercer main draw de Grand Slam, después de caer en la primera ronda del US Open 2024 y este año en el debut en Roland Garros) deberá ser todo ganancia, contagio e inspiración. “El tenis es sacrificio, sacrificio y sacrificio”, le dijo alguna vez Guillermo Vilas, en un torneo de menores en Olavarría en el que Solana coincidió con la participación de Andanin, la hija mayor del hombre que popularizó el tenis en el país. La anécdota, contada a LA NACION por Omar Sierra, el papá de Solana, es una máxima que la mejor tenista nacional de la actualidad tiene muy presente. Su aparición, teniendo en cuenta la falta de apoyo y otros obstáculos que tuvo en su transición al profesionalismo, es un “milagro” más del tenis argentino. Apasionada y enamorada de lo que hace, tiene todo para seguir evolucionando. El viaje recién está comenzando y el horizonte es alentador.
Lo mejor de Sierra-Siegemund
Gran reconocimiento para la argentina
Por haber sido la primera lucky loser en los 8vos de final de singles femenino de la Era Abierta, Wimbledon le pidió a la marplatense que antes de irse del torneo dejara una raqueta y la ropa que utilizó para ser exhibida en el museo del torneo (Wimbledon Lawn Tennis Museum), mundialmente famoso por los artículos que luce: trofeos, prendas de la época victoriana e indumentaria de grandes campeones, entre tantos artículos.
Tras el partido, en ESPN, Sierra expresó: “Estoy un poco triste. Tenía muchas ganas de seguir avanzando, de seguir ganando, pero creo que han sido dos semanas muy positivas para mí. Ha sido un sueño. Si me preguntabas antes de empezar la qualy no me imaginaba estar en la segunda semana, así que estoy súper contenta”. Y añadió: “Sabía que Siegemund era complicada, una jugadora con variantes, estuvimos entrenando bastante las llegadas a los drops, pero no fue mi mejor día en lo tenístico. Ella jugó bien, tiene un juego que no me conviene. Tiene mucha experiencia, se agrandó en los momentos importantes”.
Por Sebastián Torok