En diálogo con Fénix, el abogado Miguel Oliva, representante de la jueza Virginia Illanes Bordón, explicó los motivos de la renuncia de la magistrada al cargo y cuestionó duramente la actuación del abogado David Calipo, impulsor de las denuncias
19:04 | Viernes 05 de Diciembre de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
En diálogo con Fénix, el abogado chileciteño Miguel Oliva, representante de la jueza Virginia Illanes Bordón, explicó los motivos de la renuncia de la magistrada al cargo y cuestionó duramente la actuación del abogado David Calipo, impulsor de las denuncias en su contra.
Oliva afirmó que la decisión de Illanes Bordón se fundamenta exclusivamente en cuestiones de salud, tras atravesar una situación de extrema presión mediática y emocional. “La renuncia se sustenta netamente en una cuestión de salud. Mi clienta había sido víctima de una persecución política desde el año 2024”, expresó. En ese marco, reveló que la jueza incluso llegó a intentar quitarse la vida en medio de las acusaciones y la exposición pública.
El letrado señaló que la magistrada había tomado licencia por estrés y que, con el paso del tiempo, comprendió que no estaba en condiciones de volver a ejercer luego de 15 años de función judicial. Por ello, resolvió dar un paso al costado para priorizar su bienestar emocional.
Oliva apuntó directamente contra Calipo, a quien acusó de sostener imputaciones sin respaldo probatorio. “En dos años no nos han mostrado una sola prueba de nada de lo que se ha dicho. Todo ha sido mediático”, sostuvo. Además, denunció que se instaló la idea de un procesamiento como si se tratara de una condena firme, cuando —según explicó— ese fallo fue declarado nulo posteriormente.
El abogado detalló que, en el fuero administrativo, la denuncia está presentada desde 2024 y nunca se abrió formalmente. En ese sentido, aclaró que nunca existió un juicio político, ya que en el caso de jueces de primera instancia el mecanismo constitucional es el jury de enjuiciamiento, y ese proceso jamás se activó.
“Mi clienta no se amparó en nada. Todo lo contrario: fue a indagatoria, enfrentó el proceso y hoy renunció, por lo que ni siquiera tiene fueros”, enfatizó Oliva.
Finalmente, cuestionó que durante todo este tiempo no se haya especificado concretamente cuál era la acusación formal: “No me puedo defender de algo que no sé. Si alguien tiene las pruebas, que las muestre. Nosotros no conocemos ninguna”.
La renuncia de Illanes Bordón la deja completamente fuera del Poder Judicial y del alcance del jury, cerrando así un capítulo que, según su defensa, estuvo marcado más por la presión mediática que por la acción institucional formal.
