En diálogo con este medio, Ignacio Kovarsky, presidente de la Federación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), manifestó su categórico rechazo a la iniciativa.
11:03 | Miércoles 03 de Diciembre de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
El proyecto de una diputada provincial bonaerense que propone la implementación de un impuesto a la emisión de gases de las vacas ha provocado una fuerte respuesta por parte del sector agropecuario. En diálogo con este medio, Ignacio Kovarsky, presidente de la Federación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), manifestó su categórico rechazo a la iniciativa.
Kovarsky relató que la noticia generó sentimientos de "desconcierto, asombro, pero también después un poco de bronca", al considerar que el proyecto demuestra un desconocimiento considerable del sistema productivo y de la discusión ambiental argentina. El dirigente ruralista señaló que, desde una perspectiva científica, el gas metano ($CH_4$) emitido por las vacas es de origen biogénico, con un ciclo de vida corto, estimado en 10 años. A diferencia de otros gases industriales que persisten por cientos de años, el metano bovino se descompone y es reabsorbido por el sistema natural (plantas y pasto), volviendo al circuito. Subrayó que, de hecho, la ganadería argentina, por sus extensas pasturas, "absorbe más [gases] de lo que emiten nuestras propias vacas", por lo que el debate ambiental actual se centra en el "equilibrio o de balance" de emisiones, y no solo en las mismas.
El presidente de CARBAP cuestionó duramente el objetivo real de la propuesta. Afirmó que los fondos recaudados por esta tasa irían a un fideicomiso para subsidiar o generar circuitos de reciclaje de residuos sólidos urbanos de grandes ciudades. "No tiene absolutamente nada que ver con la mitigación de gases de efecto invernadero en las vacas", sentenció, calificando el proyecto como "un curro" con fines puramente recaudatorios.
Además, criticó la falta de conocimiento de la diputada sobre la actividad, mencionando que Argentina cuenta con 51 millones de cabezas de ganado, donde más del 60% se cría sobre pastizales. Aclaró que los animales pasan más de 600 días comiendo pasto y solo unos 120 días finales se destinan a la terminación con grano, un sistema muy diferente al de países con menos pasturas. Finalmente, el dirigente expresó que el sector tiene un gran potencial de crecimiento si se logra mantener la estabilidad del negocio a largo plazo, buscando mayor transparencia en la cadena y cumpliendo con los cupos de exportación internacionales, como la Cuota Hilton.