La actriz habló del éxito de la producción de Sebastián Ortega y dio detalles de cómo fue trabajar con la novia de Mauro Icardi en la segunda temporada
16:19 | Jueves 21 de Agosto de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
En el Barro, el spin-off de El Marginal, se estrenó hace una semana y se convirtió en un éxito en la plataforma que las produjo. Es por eso que Ana Garibaldi, la encargada de personificar a Gladys Guerra de Borges, la esposa de Mario Borges, estuvo como invitada en Desayuno Americano (América TV) para hablar de la serie de Sebastián Ortega. En diálogo con Pamela David y el resto del panel contó cómo fue trabajar con la China Suárez en la segunda temporada.
Eugenia hará de Nicole, una prostituta VIP que llega a La Quebrada y tiene que comenzar a vivir dentro de la prisión. “Espectacular. Yo la pasé bárbaro con la China, es común. Es una tipa recopada, nos llevamos bárbaro. Todos nos llevamos bien”, dijo acerca de su compañera de elenco, quien hoy en día está más en el foco por su relación con Mauro Icardi que por su trabajo.
Acto seguido, la actriz contó una anécdota compartida con la cantante. “De golpe estábamos en la calle filmando y la China había invitado con hamburguesas a todo el equipo artístico y técnico. Todos dijeron: ‘Llegaron hamburguesas’ y la China dijo que eran de parte de ella y empezamos todos: ‘No, estás loca’”, recordó sobre el detrás de escena de las grabaciones.
La China durante las grabaciones
La China durante las grabaciones de la segunda temporada de En el Barro (Foto: Instagram)
Muchos pensaron que Suárez sería parte del elenco desde el principio, esto generó revuelo en redes sociales, ya que comenzaron algunos rumores de que la podrían haber eliminado de las escenas. Sin embargo, las aclaraciones no tardaron en llegar. La China compartió un collage elaborado por una fanpage, donde se repasaban distintos momentos de las grabaciones junto al elenco y a los técnicos de la producción con la frase: “Falta menos para conocer a Nicole”. De ese modo, la actriz confirmó con un gesto sutil que su presencia en la serie está asegurada, aunque de una manera diferente: su participación llegará recién en la segunda temporada de En el barro.
En paralelo, la cuenta oficial de la producción alimentó la expectativa de los fans. Publicaron una fotografía de la actriz y le pusieron nombre y rostro a su papel en la trama. “Un poquito de spoiler del personaje de la China Suárez”, propusieron desde el perfil de la serie en redes sociales. Entonces compartieron una imagen donde se ve a la artista, en plena acción, dentro de un auto y rodeada de cámaras durante el rodaje. “Nicole, prostituta vip de clientes millonarios”, así describieron al personaje con el que la exCasi Ángeles llegará a la cárcel y sacudirá la ficción.
Ana Garibaldi contó cómo era la Locomotra Olivera en las grabaciones de En el Barro (Video: América TV)
Por otro lado, Garibaldi recordó el paso de la Locomotora Olivera por el programa. La intérprete puso en primer plano la dificultad de hablar de ella ahora que falleció. “Me cuesta mucho hablar en pasado de ella, porque es como que… No sé, no caigo todavía”, expresó con honestidad, aludiendo a la huella que dejó quien compartió escenas intensas y memorables en la serie. Desde su perspectiva, la relación en el set estuvo marcada por una convivencia armoniosa entre el elenco femenino, destacando las cualidades de la deportista convertida en actriz: “Era muy alegre, muy educada, muy coqueta, hípercoqueta”. El cariño y la complicidad se manifestaron incluso durante el rodaje de escenas complejas, como aquellas que ocurrieron en situaciones de tensión física o exposición ante las cámaras.
Durante la apuesta de Ortega, varias de las protagonistas se mostraron desnudas ante la cámara, bajo la supervisión de expertos. Sin embargo, la boxeadora se negó a ser parte de esto y Ana contó la conversación que tuvieron sobre el tema y la negativa de hacer desnudos: “No, la Locomotora, nooo. Olvidate. No, no, no. Yo me reía porque me decía: ‘Estás loca. Nena, esto no lo hago ni que me paguen un millón de dólares’“.