En diálogo con Fénix, el representante de UPSAP, Leo Nieto Vera, denunció que 55 trabajadores de seguridad del Hospital Vera Barros fueron obligados a renunciar para ser recontratados por una nueva empresa, perdiendo antigüedad e indemnización.
17:04 | Jueves 11 de Diciembre de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
En diálogo con Fénix, el representante de UPSAP, Leo Nieto Vera, explicó que los 55 trabajadores de seguridad que prestaban servicios en el hospital Enrique Vera Barros fueron forzados a renunciar antes del 1 de diciembre para poder ser tomados por la nueva empresa adjudicataria, Omega, de origen tucumano.
Según relató, si bien en una primera instancia el gremio logró que “ningún trabajador quedara afuera”, la continuidad laboral se dio bajo una condición irregular: todos debieron firmar su renuncia para ingresar nuevamente desde cero, perdiendo la antigüedad construida durante años y la indemnización que les correspondía por ley. “Los obligaron a renunciar a sus derechos”, afirmó.
Nieto Vera sostuvo que la maniobra configura “un fraude laboral”, contemplado en la Ley de Contrato de Trabajo, y remarcó que existen antecedentes nacionales donde la Justicia actuó de oficio en casos similares. Aseguró que personal de la Secretaría de Trabajo se presentó en el hospital y que varios empleados confirmaron haber sido presionados para renunciar, dejando constancia ante funcionarios del organismo.
Durante una reunión en la Secretaría de Trabajo participaron representantes de las empresas Prevenir y Omega, autoridades del Ministerio de Salud y el propio gremio. Nieto Vera denunció que las empresas “estaban ensayadas” y que el operativo tuvo como fin evitar responsabilidades laborales.
El dirigente también cuestionó que se haya contratado a una empresa de Tucumán cuando en La Rioja existen firmas habilitadas con trayectoria en el sector. “¿Para qué traer una empresa de afuera? La plata se tiene que quedar en la provincia, no irse”, expresó.
Sobre los sueldos, explicó que el salario según escala es de 1.480.000 pesos, pero que en el hospital muchos trabajadores no llegaban ni a 900 mil. Además, advirtió que al ingresar como nuevos empleados quedan en período de prueba, lo que facilita despidos sin posibilidad de reclamo.
Finalmente, Nieto Vera sostuvo que el gremio espera que la Justicia actúe. “Es un fraude grande como una casa”, afirmó, y pidió que intervengan fiscales o jueces laborales para proteger a los trabajadores.